Varios proyectos recientes de investigación de mercado nos permiten anticipar las tendencias de consumo en 2022 y los cambios en los hábitos de compra. Primero el Covid, y después la guerra en Ucrania, han cambiado profundamente nuestros hábitos y, al mismo tiempo, los productos que compramos. La situación económica y geopolítica actual añade otra capa de complejidad. Ahora más que nunca es necesario apoyarse en estadísticas concretar para proyectarnos en el futuro.
Estadísticas: el impacto del Covid en los hábitos de compra
- El 46% de los consumidores dicen estar dispuestos a pagar más por marcas comprometidas
- 15%: el coste medio extra aceptado por los clientes por una marca responsable
- 17%: el coste medio extra aceptado por los clientes por una marca de comida responsable
- El 40% de los consumidores compran al por mayor.
- El 83% de los consumidores quieren que las marcas se comprometan de maneras específicas
- El 78,9% de los consumidores intentan comprar productos locales
- El 78,4% dicen que favorecen los productos que promueven el bienestar animal
- El 46% de los trabajadores se muestran preocupados por el teletrabajo
- 2 o 3 días a la semana: teletrabajo estructural
- Clic y recoge: +13 puntos entre 2019 y 2021 (el 41% de los consumidores franceses los usan)
- En comparación con 2013, el 50% del tráfico de las tiendas físicas podría desaparecer en los próximos 5 años
- El 50% de los compradores online compraron un producto de segunda mano en 2021
- El ahorro es la principal motivación para el 80% de los compradores de productos de segunda mano
¿Hacia un consumidor más responsable?
La crisis del Covid fue el catalizador para el consumo de productos locales y orgánicos. Aunque la locura por todo lo orgánico disminuyó en 2021, eso no debería oscurecer el cambio subyacente en el comportamiento. En 2021, el 78,9% de los consumidores decían intentar comprar productos locales. Favorecer una cadena de distribución corta es una forma de responsabilidad, y no es la única; la misma investigación de mercado indicó que el 78,4% de los consumidores prefieren elegir productos que promuevan el bienestar animal.
¿Se está volviendo el consumidor más responsable? Más allá de la declaración de intenciones, es esencial fijarse en que el 40% de los consumidores ya han adoptado la costumbre de comprar al por mayor. Reservada en sus inicios para los usuarios pioneros más convencidos, este tipo de distribución se ha democratizado. Incluso en el sector del lujo, «rellenar» los envases está de moda (ver por ejemplo la nueva tienda Clarins aquí).
Incluso si los efectos todavía no son muy concretos en lo que vemos en el día a día, la guerra en Ucrania marca el fin de la globalización (puedes ver aquí nuestra investigación sobre el estado de ánimo de las empresas). El retorno a las cadenas de suministro cortas es inevitable y contribuirá a reforzar el espíritu de ecorresponsabilidad entre los consumidores.
Dentro de 5 años, el 50% del tráfico en las tiendas físicas habrá desaparecido.
E-commerce y tiendas físicas
El ser humano está, por supuesto, lleno de contradicciones. A pesar de todas sus buenas intenciones en relación con la responsabilidad, predominantemente la ambiental, nunca se había mostrado tan interesado en el e-commerce. El número de personas que visitan las tiendas físicas en los centros de las ciudades ha caído un 38,7% en 8 años, y en los centros comerciales ha caído un 29,4%. Estimamos que, dentro de 5 años, el 50% del tráfico en las tiendas físicas podría desvanecerse.
El crecimiento continuo del e-commerce
El consumismo no desaparecerá durante ese lapso, puesto que las tiendas electrónicas simplemente sustituirán esas compras realizadas en persona. Francia ha ganado así 1 millón de ciber compradores en 2020, todo ello según el Observatoire des Usages internet de Médiamétrie. En 2020, un total de 800.000 nuevos ciber compradores se unieron a sus filas.
Aunque la cuota de mercado de los alimentos en el e-commerce se ha estancado en el continente europeo por debajo del 5% (con la notable excepción de Reino Unido), en Francia en 2020 llegó al 9%. Los datos de 2021 deberían, por lógica, mostrar un aumento por encima del 10%. Los hábitos de compra han cambiado de manera permanente, y no hay ningún modo de revertir esta tendencia. Para aquellos que abran tiendas físicas, el éxito se resumirá en 3 factores:
Comida: cambiando a alternativas más baratas
Se espera que la inflación en los alimentos, algo ya visible en sus precios de venta, influya en la industria de la hostelería. El aumento de precios en las materias primas tendrá que transferirse, algo que podría afectar a los clientes de los establecimientos de nivel medio. Ya debilitados por el confinamiento, los márgenes de los restaurantes recibirán todavía más presión en 2022.
Lógicamente, la elección del consumidor debería trasladarse hacia alternativas más baratas (tal y como ocurre en la venta al por menor en la industria alimentaria, puedes consultar nuestro análisis aquí) o distanciar en el tiempo sus gastos. Los establecimientos que practican una política 100% online desde una «dark kitchen» debería irles bien en este contexto. Sus gastos fijos son mucho menores, y la proporción precio/placer podría turnarse en su favor si el empobrecimiento generalizado de la población se confirma. Aun así, en los próximos meses tendremos que estar atentos para ver si la uberización de la entrega a domicilio no se pone en duda de manera general, algo que pondría fin al desarrollo de este y otros sectores relacionados.
En 2022, están presentes todos los ingredientes para que el sector de segunda mano experimente un desarrollo fulgurante.
Productos de segunda mano, las estrellas del comercio del mañana
La investigación de la Federación Francesa de Venta a Distancia (FEVAD) refuerza nuestra creencia establecida desde hace ya mucho de que el sector de segunda mano será la estrella del mañana. Los datos son elocuentes y cubren todos los objetos de segunda mano (ver nuestras estadísticas sobre productos de lujo de segunda mano). Entre los ciber compradores (el 80% de los usuarios de Internet de más de 11 años):
- El 50% han elegido productos reacondicionados o de segunda mano (datos de 2021);
- El 80% se sienten motivados ante la idea de ahorrar dinero;
- El 51% adquieren productos de segunda mano para tener acceso a un producto que les resultaría inaccesible siendo nuevo.
En 2022, están presentes todos los ingredientes para que el sector de segunda mano experimente un desarrollo fulgurante:
- Un descenso masivo en el poder adquisitivo debido a la inflación.
- El aumento en el precio de los productos nuevos por la falta de materias primas.
- Escasez de nuevos suministros por la interrupción de las cadenas de producción.
En 2020, el sector DIY ha crecido un 13%.
DIY y la comodidad del hogar
En 2020, el sector DIY ha crecido en un 13%. En concreto, las ventas online se han duplicado en comparación con el año anterior, y 2021 será otro año notable para el sector. Kingfisher, el gigante británico del DIY, ha anunciado un aumento de los beneficios del 6,8% para 2021.
2022 debería ser otro año excelente para el sector. Para empezar, la inflación y el descenso en el poder adquisitivo intensificará las prácticas DIY y hará que recurrir a especialistas se vuelva más raro. Los agentes internacionales como Leroy Melin (presente en más de 10 países) no se equivocan; se están orientando en masa hacia la formación del cliente, y su modelo de negocio está evolucionando hacia los servicios (cursos, coaching, poner a la gente en contacto con profesionales, alquiler).
Cuidar de tu hogar (cocina, jardín…) será por lo tanto una de las tendencias significativas del 2022.
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Publicado en Marketing.